La Encriptación Como Método para Evitar Espionajes Como el del Caso Prism

Hoy vamos a repasar y poner blanco sobre negro el asunto del espionaje de banda ancha y como podemos salvaguardar, aunque sea un poco, nuestra intimidad.

Sergio Méndez Galindo
Sergio Méndez Galindo
12 de June · 582 palabras.
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🕘 Resumen

Después de que el programa de la NSA que involucra a Verizon en la recolección y monitoreo de llamadas de sus clientes fuera expuesto por "The Guardian", el Washington Post reveló detalles sobre un programa de espionaje aún más complejo llamado Prism. Este programa permitió a la NSA monitorizar las actividades en línea de los ciudadanos, incluyendo cualquier aspecto, como el historial de correos electrónicos enviados y recibidos, tipos de archivos y mensajes publicados en la red y archivos transferidos. Muchas personas comenzaron a buscar formas de enviar archivos o mensajes encriptados para asegurarse de que nadie en la red pudiera seguir sus pasos y para proteger de manera segura sus documentos en línea. Encriptar archivos es fácil, pero requiere trabajo extra tal como las contraseñas de las unidades de disco. El uso de una VPN o Red Privada Virtual puede anonimizar u ocultar nuestra verdadera ubicación geográfica y enviar toda la información a través de un túnel encriptado lo que hace que el uso de servicios en línea sea más seguro. También existen aplicaciones gratuitas de mensajería de texto y llamadas seguras como RedVoice Beta o Google Voice que mantienen el número oculto. Preocuparse más por el gobierno que por los cibercriminales es un problema para la seguridad en línea.
Justo después de que “The Guardian” expusiera el programa de la NSA (Agencia de Seguridad Nacional) en el cual Verizon monitorizaba y recopilaba datos de llamadas de los clientes para enviarlas al gobierno, el Washington Post revelaba los detalles de Prism, un programa de espionaje mucho más complejo en donde la NSA estaba monitorizando las actividades online de los ciudadanos.

Actividades que incluían cualquier aspecto: historial de emails recibidos/enviados, tipos de archivos y mensajes publicados en la red, archivos transferidos y hacia donde, entre otros.

De repente, todo el mundo quería saber como se pueden enviar archivos o mensajes encriptados, con el objetivo de que nadie en la red pueda seguir su rastro, así como para guardar de forma segura sus documentos y saber que nadie más en la red podría abrirlos.

Encriptar es sencillo

Encriptar archivos con una clave privada -que solo podrán ver personas autorizadas- supone trabajo extra, tal y como sucede con las contraseñas de de unidades de disco que se instalan para que nadie pueda encender nuestro ordenador y acceder a nuestros documentos.

El simple hecho de meternos en un hotspot o Punto de Acceso abierto en un aeropuerto, o conectarnos sin permiso a la red del vecino suponen riesgos de seguridad. Cualquiera podría estar observando lo que hacemos, grabando logs o informes de nuestra actividad y recopilando datos. La gente tiende a preocuparse más del gobierno que de los cibercriminales, pero debería ser al contrario.

Una VPN o Red Privada Virtual anonimiza u oculta nuestra verdadera localización geográfica y envía toda la información sobre un túnel encriptado. Se trata de buscar uno de los muchos servicios VPN (TorVPN u OpenVPN son gratis) o aplicaciones Peer-to-Peer (LogMeIn de Hamachi o Comodo Unite son gratis) que sirven para esto, si nos interesa mejorar la seguridad de las conexiones.

También podemos echar un vistazo a algunas aplicaciones de mensajería de textos o utilidades de llamadas protegidas: por ejemplo RedVoice Beta o Google Voice (mantiene oculto nuestro número). Esto requiere que la otra persona tenga instalado nuestro mismo software para comunicarse con nosotros, pero la seguridad lo merece.

Personalizar nuestro encriptado

Casi todos hemos subido archivos a DropBox, subido algún video a Youtube o compartido imágenes en Facebook. Compartir archivos es genial, y estos servicios están pensados para que resulte fácil y rápido hacerlo. SIn embargo, como contrapartida tenemos que subir archivos implica, por otro lado, que ya sea la compañía responsable del servicio, el gobierno o quizá un cibercriminal que se ha colado podría acceder a la información. Es por esto que encriptar es casi una necesidad.

Muchas aplicaciones de sofware -entre ellas Adobe Acrobat y Microsoft Office- poseen herramientas propias de encriptado. Personalmente, recomendamos una que es open-source (gratuíta) llamada TrueCrypt.DigitalQuick (actualmente en fase Beta) que nos ofrece la posibilidad de encriptar archivos de Dropbox.

¿Nos soprende el sistema PRISM?

Algo que no terminamos de entender, aunque sea una aberración, es que la gente esté realmente sorprendida por este nivel de seguimiento. Quizá haya algunos que todavía se acuerden de que esto ya sucedía en la administración Bush.

Por lo que sabemos, tanto en Irán como en la mayoría de países de Europa del Este, las comunicaciones de cualquier ciudadano pueden ser rastreadas sin previo aviso si así lo consideran necesario las autoridades.

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