Criminalistica: el Caso de “el Loco Robert”.

En este artículo ud podrá conocer un caso de la vida real, de un delincuente avezado, cruel, extremadamente violento y comprender cual es la causa de su predisposición a la violencia. Podrá conocer porque hay adolescentes y niños violentos. Le procuramos un resumen de algunos de los muchos estudios que están siendo realizados en esta área de estudi

Pedro A.  Reyes Ramos
Pedro A. Reyes Ramos
11 de November · 2140 palabras.
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🕘 Resumen

El artículo describe una situación vivida por el autor en su juventud en La Victoria, Lima, Perú. El protagonista, apodado "Loco Robert", era conocido por su comportamiento violento y era de una familia muy pobre. Un día, el grupo de amigos del autor presenció cómo la policía buscaba a la madre de Robert con urgencia porque había cogoteado a una mujer policía en la Plaza Manco Cápac y le estaba por cortar la yugular. El grupo se dirigió a la plaza para ver lo que ocurría y vieron a Robert cometiendo la agresión. La policía abrió camino a través de la multitud y finalmente, la madre de Robert logró interceder por la vida de la mujer policía, quien había sido abrazada con un cuchillo en la yugular. El artículo destaca la situación de pobreza y violencia que se vivía en el barrio en esa época y cómo la familia de Robert intentó salvar la vida de la víctima. Es una historia impactante y emotiva que muestra la complejidad de las situaciones de violencia y los intentos por detenerlas.
 En el distrito de La Victoria, conocí en la década de los setenta, más o menos en 1972 a un chico de 17 años, que casi todos los días, vivía en medio de peleas, grescas.

Era de familia muy pobre, vivía en un cuarto de dos piezas, con su madre, hermana y dos hermanitos menores. Su padre era sastre, una persona muy alegre, bonachón.

Su madre era una mujer buena, amable, muy trabajadora.

Este joven delgado, de apariencia intimidatorio, era mi amigo.

Un día estábamos en el barrio sentados, en el Jr. Luna Pizarro, con Sebastián Barranca y llego un patrullero, del que bajaron dos policías corriendo y nos preguntaron:

¿Donde vive el “Loco Robert?

No queríamos contestar. Uno de los policías dijo:

No estamos buscándolo, necesitamos a su madre, urgente.

Llamamos a su mama del Loco Robert y la Sra. bajo las escaleras rápido, acompañada de su esposo.

Los policías dijeron:

“Sra. por favor vamos rápido, su hijo tiene a una mujer policía cogoteada en la Plaza Manco Cápac y le va a cortar la yugular, con un cuchillo filudo”.

Los padres del Loco Robert subieron al patrullero y se fueron con los policías. Nosotros corrimos hasta la plaza para ver, lo que ocurría.

Una gran cantidad de gente rodeaba a dos personas. La gente gritaba: No seas malo, no la mates…..

“Suelta a la señorita, desgraciado”

“Maldito, deberían matarte”.

“El Loco Robert, estaba allí, protagonizando una escena de espanto. Tenía a la mujer policía cogoteada, con un filudo cuchillo puesto en la yugular. La mujer policía, con una expresión de pánico en el rostro, no podía soltarse del abrazo de la muerte.

Los ojos de la fémina, arrojaban lágrimas.

Los policías se abrieron camino entre la gente y dejaron que la madre de Loco Robert, interceda, por la vida de la mujer policía.

“Robert…Robert, deja a la señorita, suéltala….le grito su progenitora.

El peligroso delincuente, contesto:

“Para que se mete conmigo, esta perra”. Me ha querido detener por fumar un pito”.

La señora, se acerco y le tomo la mano con cariño, al maleante y le suplico: “Suéltala, no la mates, no seas cobarde, es una mujer como yo, déjala ya”.

Robert contesto:

“Le dije que no se meta conmigo y me saco su arma, me quiso disparar mama”.

En el forcejeo, el maleante logro desarmar rápidamente a la mujer policía y su arma de reglamento cayo al piso, siendo robada por otros dos mozos, que acompañaban a Loco Robert, cuando la mujer policía los intervino por fumar pasta básica de cocaína en la Plaza.

Esos mozos eran “Tata y Anchante”. Dos maleantes peligrosísimos, de la época, de diecinueve y diecisiete años.

Loco Robert, miro a su madre y le dijo:



“Mira ama, si esta perra se vuelve a meter conmigo, la mato, sin mas”.

“La señorita no se va a meter más contigo. Suéltala ya”. Dijo la mama del delincuente.

Loco Robert, la soltó, empujándola al piso donde cayó la mujer policía.

Los otros policías se arrojaron sobre el delincuente, al que esposaron, subieron al patrullero y se lo llevaron detenido. Como estaba requisitoriado, Loco Robert, termino en la Cárcel de Cachiche, en ICA.

Loco Robert, tenía como hobby, cortarse el mismo los brazos, con vidrios rotos. El mismo se cortaba las venas, los brazos, por diversión, por que le gustaba ver sangre.

En ambos brazos, tenia cortes en cantidad.

Se peleaba con cuchillo casi todos los días, tenía varios cortes en el vientre.

Varios maleantes mayores, habían sido cortados, en la cara, en el abdomen, por atreverse a enfrentarse o reclamarle algo, al Loco Robert.

Loco Robert, no tenia miedo a nada, ni a nadie, era muy violento, cortaba a la gente porque si, por puro gusto.

Masacraba a jóvenes de distintos barrios, que le temían y cada que lo veían venir, corrían a esconderse en los techos.

Robaba casi todos los días, era muy hábil.

Cuando era detenido, la policía le pegaba, le daban unas palizas terribles, pero el soportaba, sin derramar una lagrima.

Un año cuando ya era adulto, busco meses a un policía, al que cuando lo hallo, reglo por semanas, hasta que una noche, cuando este bebía licor en un hotel con una meretriz, entro a la habitación, rompiendo la puerta y lo mato.

Loco Robert en toda su trayectoria había matado seis personas, tres delincuentes, dos mujeres y un policía.

Las muertes de los delincuentes, fue en enfrentamientos a cuchillo limpio.

Las dos mujeres, las mato y desapareció.

Nunca nadie las volvió a ver nunca más. Simplemente desaparecieron, para siempre.

Robert bebía abundante licor, cerveza, ron, pisco, consumía droga todos los días, casi no se alimentaba.

Era muy violento, demasiado se diría. Era frío, calculador, muy hábil con el cuchillo, no tenia sentimientos, mataba y cortaba a la gente, con enorme placer.

Cuando caía, pagaba para que no lo manden a la Cárcel de Lurigancho, porque si llegaba allí, lo mataban.

Disfrutaba la cárcel, los enfrentamientos con cuchillo.

Al Loco Robert le gustaba el café, las tostadas con mantequilla. Le gustaban los carbohidratos: yuca, papa, camote.

Casi no ingería carne de res, pescado, porque decía:

“El pescado deja apestando la boca, las espinas te atoran, prefiero comer un puré de papa, con su ají, su ensalada de cebolla picada con rocoto y listo”.

“La carne es muy cara, es para gente gaga, yo soy “ tacu tacu”, con arroz y su huevo frito”. Aunque del huevo le daba asco la yema, solo comía la clara.

Una de las mujeres que mato, lo hizo porque esta lo menosprecio, por feo y por maleante.

La vio en una calle, en Lince.

Se sintió prendado de ella, desde el primer momento, la enamoro, pero esta, ni lo miro.

Todos los días iba a la misma hora para verla llegar a su casa, la enamoraba, pero la mujer ni caso le hacia.

Un día la abordo y le ofreció un regalo, una sortija de oro robada, pero la mujer, lo rechazo, diciéndole:

¿“Que tienes piojoso? ¿No te has visto en un espejo?
“ No me jodas mas, me das asco, eres repugnate….”

Un gran odio comenzó a nacer en su corazón. Se sentía humillado, menospreciado, muy dolido. “Loco Robert, por primera vez en su vida lloro”.

“Sacaba su chaveta y la afilaba contra el piso……”

Decía: “Esta perra, me desprecia, porque soy feo,” “Me mira como a una rata de buzón….”

Robert comenzó entonces a planear su venganza contra ella.

Decidió, secuestrarla, con ayuda de “Tata y Anchante”.

Hicieron el trabajo de modo sincronizado, nadie noto cuando la cargaron a la fuerza en un auto, apuntándola con una pistola en la cabeza.

La mujer suplico, por su vida, pero no sirvió de nada.

La golpearon a muerte, la desfiguraron a chavetazos, Robert la ahorco con un cable.

Para que nadie la pueda encontrar, para no dejar rastros de su cadáver, la arrojaron a una poza de un local abandonado en El Agustino. En esa poza, que antes sirvió, para parchado de llantas de vehículos, llena de agua arrojaron el cadáver, pero antes echaron una saca de detergente industrial en polvo.

El delincuente parecía más loco de lo que ya estaba.

¿Para que es el detergente loco? Le pregunto Anchante.

Loco Robert contesto: “Para darle un ultimo baño de despedida y vaya al cielo bien limpiecita”. El cadáver de la mujer fue arrojado en la poza totalmente desnudo, sumergiéndose en la espuma del detergente con agua, que llenaba totalmente la poza.

Le pusieron una gran tapa de metal, y encima latas de combustibles vacías, como si quisieran disfrazar la poza.

Esta practica, la emplean los criminales avezados, bien informados de cómo se puede desaparecer un cadáver.

El detergente en polvo destruye los tejidos blandos del cuerpo. Separa proteínas y grasas. Disuelve el cuerpo

Seis meses después, de la mujer solo quedaban algunos huesos, limpios de carne, que recogieron, y arrojaron por distintas partes: alcantarillas, servicios higiénicos, canales de regadíos, a perros vagos para que se alimenten.

No quedo rastro de la mujer. Es más fácil deshacerse de un esqueleto, que de un cuerpo de una persona muerta. ¿No?

Un esqueleto no pesa tanto.

La pregunta que siempre nos hacemos, cuando conocemos casos como este, de personas sicópatas, violentas en extremo, es:

¿Porque son así? ¿Que es lo que lleva a seres humanos, a ser tan crueles, violentos, que parecieran no tener alma?

¿Por qué hay personas violentas, crueles, que se inflingen asimismos, cortes en los brazos, retan y desafían a la policía, como si quisieran recibir balazos de parte de la autoridad?

¿Por qué tenemos tantos crímenes, protagonizados por jóvenes, adolescentes, en las zonas empobrecidas de Lima, que son nidos de pandilleros?

Richard Wurtman ha encontrado que dietas de alto carbohidratos y bajas proteínas afectan los niveles normales de la serotonina, neurotransmisor natural que cuando está en niveles alterados o anormales tiene efectos cerebrales asociados con tendencias suicidas, agresión y violencia, alcoholismo y conducta impulsiva. Las funciones normales de la serotonina son la regulación de la excitación, los estados de ánimo, la actividad sexual, la agresión y el control de los impulsos. Algunos estudios asocian niveles bajos de serotonina con la conducta violenta-aberrante.

En los distritos mas pobres de las ciudades de Latinoamérica, donde abundan las pandillas juveniles, las familias son muy pobres y casi no ingieren proteínas en su dieta, debido a que la carne de res, el pescado, son muy caros, no consumen leche en el desayuno, solo café, te, acompañados de panes con mantequilla, nada de queso, jamón, mayormente se alimentan con papas, camote, cereales, que es lo que mas esta al alcance de sus bolsillos.

En Lima en los distritos pobres del Cono Sur y Norte, ocurren frecuentemente hechos de violencia, violaciones, asesinatos, agresiones con cuchillo, la población vive en medio de grescas y peleas permanentes de grupos de delincuentes que viven allí. La pobreza es tanta que en su dieta no esta presente la carne de res, los huevos, la leche, el queso. No se consume carne de res, pescado.

Jeffrey Halperin comparó varones agresivos con no agresivos, ambos con diagnósticos de ADD (déficit de atención) combinado con diagnósticos de hiperactividad. Se les administró la droga fenfluramina, que provoca respuestas en el sistema serotonergénico. Los resultados mostraron cambios positivos en los niños agresivos al bajarle los niveles de serotonina.

Matti Virkkunen cree haber identificado variaciones genéticas específicas que predisponen algunos individuos hacia la conducta suicida. Tomando casos de jóvenes ofensores violentos, descubrió que una variante del gene THP (tryptophan hydroxylase) cuyos códigos producen una enzima necesaria para la biosíntesis de la serotonina, estaba asociada fuertemente con los intentos suicidas irrespectivo a si los jóvenes eran, o no, impulsivos.

Un segundo estudio demostró que bajos niveles del metabolito 5-HIAA (localizado en el líquido cerebro espinal) están asociados con pobre control de la conducta impulsiva (sobre todo en alcohólicos).

Por último, estudios en monos consistentemente demuestran altos niveles de agresividad cuando los niveles de serotonina son bajos

Podemos concluir que muchos de nuestros jóvenes son violentos, porque su alimentación es baja en proteínas, demasiado elevada en carbohidratos. Eso es común en los barrios pobres de Lima Metropolitana. Se trataría de trastornos bioquímicos: Serotonina (serotonina).

Espero que este caso le permita a padres de familia, observar como deben alimentar a sus hijos, procurar elevar el contenido de proteínas en la dieta familiar. Al niño y al adolescente hay que alimentarlo bien, pero no con yuca, papa, camote, nada más. Hay que poner en la cena, en el almuerzo, pescado, carne de res.

No olvide que la ausencia de serotonina, puede provocar que su hijo se convierta en otro Loco Robert.

Las autoridades deben tener en cuenta los datos, los informes de Richard Wurtman, Jeffrey Halperin, Matti Virkkunen.

En esta entrega he querido dar un resumen de algunos de los muchos estudios que están siendo realizados en esta área de estudio en la relación entre factores orgánicos y conducta criminal.

Sonría y sea feliz.

PÈDRO ALEJANDRO REYES RAMOS
Instructor de Seguridad Pública y Privada
Inscrito en DICSCAMEC
Ministerio de Interior de Perú
http://www.slideshare.net/Assippperu/manual-del-escolta-guardaespaldas 
 

 



 

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