El Peligro de la “geolocalización” en las Redes Sociales
¿Quién no tiene un perfil en alguna —o en casi todas— Red Social? Miles de millones de personas en el mundo forman parte de esta nueva forma de estar en Internet y de compartir información.
Sergio Méndez Galindo
9 de December · 397 palabras.
9 de December · 397 palabras.
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🕘 Resumen
Las redes sociales han permitido la interacción entre millones de usuarios mediante la viralización de contenidos, sin embargo, a pesar de su creciente popularidad, muchas de ellas reciben críticas sobre la seguridad y protección de los datos personales de los usuarios. La geolocalización es una herramienta que se puede activar en las redes sociales, y que informa acerca del lugar exacto en el que nos encontramos en un momento determinado. Sin embargo, esta función también puede ser desactivada si el usuario lo desea. Activar la geolocalización mientras se interactúa en estas redes es una decisión personal, pero al hacerlo, estamos dando información relevante acerca de nuestros horarios y programas de uso, la cual puede ser aprovechada por hackers para diseñar un "phishing a medida" que nos permita caer en su trampa. Es importante no compartir en la red información sensible sobre nosotros mismos, nuestros familiares y amigos, con el fin de evitar que nuestros datos personales terminen en manos equivocadas, y sean utilizados para engañarnos. En conclusión, la prevención y el uso responsable de la información en las redes sociales es crucial para mantener nuestra seguridad y privacidad online.La mayoría de ellas recibe críticas sobre la seguridad y la protección de los datos personales de sus usuarios. Aun así, su número de clientes no deja de crecer casi exponencialmente, igual que un virus.
La llamada geolocalización es una herramienta que se puede activar y que informa —no se sabe bien con qué propósito— sobre el lugar exacto en el que estamos en el momento de actualizar nuestros perfiles.
Pero activar la geolocalización mientras estamos interactuando en estas redes es una decisión personal y es una función que se puede inhabilitar sin demasiadas complicaciones.
Con la geolocalización estamos dando información de más sobre dónde estamos y sobre la manera, horarios y programas que utilizamos. Sin que tengamos que pulsar sobre un enlace ni descargarnos ningún programa, estamos aireando datos que, aunque para nosotros no sean de especial relevancia, sí lo son para los hackers.
Yendo incluso más allá de la “realidad virtual”, al utilizar la geolocalización al actualizar nuestros perfiles en las redes sociales estamos diciéndole a los “piratas de la realidad” que, en este preciso instante no hay nadie en casa, a qué hora dejamos a los niños en el colegio, cuáles son nuestros horarios de oficina, a que bar vamos a desayunar a diario, dónde viven nuestros familiares y amistades, etc…
Estos cibercriminales pueden saber cuándo es nuestro cumpleaños, nuestros hobbies, dónde compramos, el qué y cuándo. De esta manera pueden diseñar un “phishing a la medida”, especialmente creado para pescarnos con el cebo que más nos tienta.
No compartamos en ninguna parte de Internet y mucho menos en las Redes Sociales información sensible sobre nosotros o nuestros familiares y amistades. De esta manera evitaremos que nuestros datos personales acaben en manos no deseadas y puedan ser usados para engañarnos haciéndose pasar por conocidos.
Pensemos un poco antes de actualizar nuestro perfil. ¿Realmente es necesario que nuestro número de teléfono, la dirección de nuestra casa o los nombres y los rostros de nuestros hijos menores de edad sean públicos?
¿De verdad necesitamos tener activada la geolocalización en nuestras Redes Sociales?
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