La Aceituna de Kalamata.

La aceituna de Kalamata, una de las variedades más conocidas de las aceitunas Griegas apreciada en el mundo entero por su valor gastronómico y sus beneficios para la salud.

Carlos R
Carlos R
17 de December · 663 palabras.
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🕘 Resumen

Según la mitología, la ciudad de Atenas recibió su nombre después de que Atenea ofreciera a los habitantes un olivo con el cual podrían crear madera, aceitunas y aceite. En contraste, Poseidón ofreció un manantial de agua salada. Los habitantes otorgaron la posesión de la tierra a Atenea debido al valor de su regalo. Actualmente, el olivo, la aceituna y el aceite de oliva siguen siendo importantes en la cultura griega. Grecia es el tercer productor mundial de aceite de oliva, con una producción de 400,000 toneladas anuales y el cultivo de la oliva se lleva a cabo en 50 de los 54 municipios del país, siendo la zona de mayor producción la del Peloponeso y Creta. Las variedades de aceituna utilizadas para la elaboración de las variedades de aceite griego son la “Koroneiki”, la “Mastoidis” y la “Adramitini”. En cuanto a las aceitunas de mesa, la más conocida es la aceituna de Kalamata, que destaca por su sabor dulce y salado, su forma almendrada y su color que varía después del proceso de conserva en salmuera, aceite o vinagre de vino.
Según cuenta la mitología, para poner fin a las disputas entre Atenea y Poseidón por quedarse con las tierras de Átila, Zeus propuso que ambos hicieran un regalo a los humanos, y que fuesen estos los que escogieran a un ganador.. Poseidón ofreció a los hombres un manantial de agua, y gracias a ella los habitantes de la ciudad pudieron construir un gran puerto, aunque no pudieron beber del manantial por ser este de agua salada. Atenea les ofreció algo de muchísimo más valor, un olivo, del que los hombres podrían conseguir madera robusta, aceitunas como alimento y aceite que les serviría para iluminar la noche. Ante este regalo, los hombres otorgaron la posesión de esa tierra a Atenea, y desde entonces, la mayor ciudad de la región es conocida como Atenas, y el olivo forma parte de su historia más antigua.

Hoy en día, el olivo, su fruto la aceituna (la oliva), así como el aceite que se extrae de esta, siguen estando fuertemente ligados a la cultura griega. Tanto es así que Grecia es actualmente el tercer productor mundial de aceite de oliva, con una producción de 400.000 toneladas anuales de aceite, el 15% de la producción mundial. El cultivo de la oliva se lleva a cabo en 50 de los 54 municipios del país, siendo la zona de mayor producción la del Peloponeso y Creta (conocida como la isla de los olivos). Las variedades de aceituna utilizadas para la elaboración de las variedades de aceite griego, de los cuales doce cuentan con Denominación de Origen Protegido son la aceituna “Koroneiki”, la “Mastoidis” y la “Adramitini”.

Entre las variedades de las aceitunas de mesa más conocidas se encuentra la aceituna de Kalamata, que recibe el mismo nombre que la región donde está más extendido su cultivo, Kalamata, al sur del Peloponeso. La aceituna de Kalamata destaca por su carnosidad, el contraste entre su sabor dulce y salado y su forma almendrada. Cuando se recolecta, esta aceituna es de color morado, sin embargo, adopta diferentes tonalidades tras pasar por el proceso de conserva en salmuera, aceite o vinagre de vino. Las aceitunas de Kalamata son conocidas en todo el mundo, y utilizadas cada vez más por chefs y cocineros para la elaboración de sus platos. Se utiliza en ensaladas (esencial en la ensalada griega), con pasta, arroces o pizzas, añadiendo a cada receta riqueza en cuanto a sabor y colores. El sabor suave o dulzón de esta variedad genera un contraste idóneo junto a un aperitivo salado, por ejemplo como acompañamiento de unas anchoas. La aceituna de Kalamata es además ideal para la elaboración de tapenade (conocido como paté de aceitunas u olivada). Untándolo en pan o acompañándolo de un buen queso podremos elaborar deliciosos aperitivos o primeros platos.

A las amplias virtudes gastronómicas de la aceituna de Kalamata hemos de sumarle las propiedades sobre el organismo que tienen las aceitunas de por sí. Las aceitunas son una fuente rica en grasas monoinsaturadas, que ayudan a regular los niveles de colesterol en nuestro organismo, ayudando a prevenir enfermedades cardiovasculares. Aporta altas cantidades de vitamina E que actúan como antioxidantes naturales. Son una fuente rica en calcio y otros minerales altamente beneficiosos para nuestra salud. Su intenso sabor favorece además la secreción de saliva y ácidos gástricos, ayudándonos a realizar una mejor digestión, que la convierten en un aperitivo idóneo.

Tras siglos de historia y tradición, la gente de la región del Peloponeso ha hecho llegar hasta nosotros esta singular variedad de aceituna negra, la aceituna de Kalamata. Tanto por su riqueza gastronómica como por los beneficios y propiedades que nos aporta, la aceituna de Kalamata goza de una reputación que le precede, demostrando una vez más que en las cosas pequeñas se esconden los grandes placeres.

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