Los Carnavales de Venecia y sus Inicios

Cómo comenzaron los famosísimos Carnavales de Venecia, su tradición, qué representan y desde cuándo se realizan éstas prácticas en la bellísima ciudad italiana.

Maria Monroe
Maria Monroe
14 de November · 744 palabras.
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🕘 Resumen

El Carnaval de Venecia es uno de los festivales más conocidos en el mundo, con casi 900 años de historia. El carnaval alcanzó su apogeo en el siglo XVIII, cuando aristócratas de diferentes lugares acudían a la festividad, y los príncipes y nobles se escapaban para disfrutar del acontecimiento. Desde 1296, el Carnaval es declarado oficialmente una fiesta nacional y se celebra durante diez días, coincidiendo con la pre-Pascua. Sin embargo, la fiebre del Carnaval comienza mucho antes, e incluso, en Venecia, nunca cesa en todo el año. El Carnaval de Venecia tiene tradiciones mucho más antiguas que se refieren a los cultos ancestrales de transición del invierno a la primavera, como las saturnales romanas o los cultos dionisíacos. Durante siglos, estos carnavales fueron la vía de escape de los ciudadanos para evadirse del gran control del gobierno veneciano. Con la ocupación de Venecia por el ejército de Napoleón, el Carnaval fue prohibido por miedo a que se generaran conspiraciones y se recuperó en 1979. En definitiva, el Carnaval de Venecia es una celebración que ha perdurado por siglos y que aún mantiene su atractivo y misterio, a la vez que representa una parte importante de la historia y cultura de Venecia.
El Carnaval de Venecia, si no es el más impresionante, es sin duda, el más conocido por su atractivo y misterio que sigue manteniendo incluso ahora, cuando ya pasaron 900 años del primer documento que hace referencia a éste famosísimo festival.
Quién no escuchó hablar alguna vez del Carnaval de Venecia? Es único en el mundo, y alcanzó su máximo apogeo en el siglo XVIII, época en la que acudían a la festividad algunos aristócratas llegados de lugares muy diversos, y lo más normal era que los príncipes y nobles se escaparan a disfrutar del acontecimiento.
Se tienen de la festividad del Carnaval desde 1094, bajo el Ducal Vitale Falier, en un documento que habla de espectáculos públicos en los días anteriores a la Cuaresma. El documento oficial que declara el Carnaval es una fiesta nacional en 1296 cuando el Senado declaró festivo el último día de la Cuaresma.
Durante siglos éstos carnavales fueron la vía de escape de los ciudadanos para evadirse del gran control del gobierno veneciano. Con la ocupación de Venecia por el ejército de Napoleón, el Carnaval quedó prohibido por miedo a que se generaran conspiraciones y se recuperó en 1979.
Sin embargo, el carnaval tiene tradiciones mucho más antiguas que se refieren a los cultos ancestrales de transición del invierno a la primavera; basta pensar en las saturnales romanas o cultos dionisíacos en los que el lema era " Semel in anno licet insanire" (Una vez al año, se permite no tener frenos).
Hubo un tiempo en que el carnaval era mucho más largo, e incluso empezaba el primer domingo de octubre para intensificar el día después de la Epifanía y culminar los días anteriores a la Cuaresma. Hoy el Carnaval dura unos diez días, coincidiendo con la pre-Pascua, pero la fiebre del Carnaval comienza mucho antes en realidad, y tal vez no sea incorrecto decir que en Venecia, la fiebre del Carnaval nunca cesa en todo el año. Una sutil euforia se arrastra por las calles estrechas de la ciudad más bella del mundo y crece imperceptiblemente, como el agua salada natural, difumina los contornos de las cosas, sugiere misterio y el ambiente de tiempos pasados.
Hubo un tiempo en que el Carnaval de Venecia permitía dejar a un lado las ocupaciones para dedicarse al ocio, estadios fueron construidos en las zonas principales, a lo largo de la “Riva degli Schiavoni”, “Piazzetta” y de la “Piazza San Marco”. La gente acudía a ver las atracciones, las más variadas: malabaristas, acróbatas, animales danzantes, trompetas, pífanos y tambores, vendedores ambulantes que vendían frutos secos como castañas y fritole (tortitas); y postres de todo tipo, siempre muy cuidadosos en señalar que su mercancía provenía de países muy lejanos.
La ciudad de Venecia, gran ciudad comercial, siempre ha tenido una relación especial con los países lejanos, en particular con el Oriente que no falta en ninguna edición del Carnaval. Siempre hay presente una referencia, un hilo rojo en representación del legendario viaje a China del veneciano Marco Polo a la corte de Kublai Khan, donde vivió cerca de veinticinco años. Un hilo rojo que serpentea a lo largo de la antigua calle “della Seta”.
Este Carnaval es totalmente distinto a la imagen española, y mucho más a la brasileña. Durante los 10 días que dura, la gente se disfraza y sale a la calle a pasear y a hacerse fotos, ya sea en desfiles improvisados ú organizados.
Los trajes que se utilizan son característicos de los años 1700 y abundan las “maschera nobile” (italiano) que es una careta blanca sombrero de tres puntas y con ropaje de seda negra. Son trajes de época del siglo XVII veneciano, como si estuvieran recién salidos de un cuadro de Canaletto. Después de 1979 se han ido sumando otros colores a los trajes, aunque las máscaras siguen siendo en su mayoría blancas, plateadas y doradas.
Teniendo en cuenta que Venecia se encuentra muy cerca de los Alpes y que el carnaval se celebra a principios de año (entre finales de enero y mediados de febrero, dependiendo del año), es recomendable ir bien abrigado.
Con éstos famosísimos carnavales, Venecia se convirtió en la mejor escuela europea del placer y el juego, de la máscara y la irresponsabilidad; en la gran virtud de la metamorfosis y el carnaval era (y sigue siendo) su gran hazaña.

Adquiere mayor información sobre El Carnaval de Venecia 2013 ingresando en Suiza Viajes.

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